Ciudad de México.- Redacción.- Por tercera vez en 2025, la audiencia de Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”, fue pospuesta en Chicago, ahora al 2 de junio, en medio de negociaciones para un posible acuerdo de culpabilidad con EE.UU.
En un nuevo capítulo del proceso judicial contra Joaquín Guzmán López, conocido como “El Güero” y uno de los líderes de la facción “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa, una corte federal de Chicago decidió aplazar, por tercera vez en lo que va de 2025, su audiencia de revisión. Inicialmente programada para el 19 de marzo y luego reprogramada al 18 de abril, la nueva fecha quedó fijada para el 2 de junio, según confirmaron fuentes judiciales estadounidenses. Este aplazamiento responde a las negociaciones en curso entre la defensa de Guzmán López, representada por el abogado Jeffrey Lichtman, y el Departamento de Justicia de Estados Unidos, con el objetivo de alcanzar un acuerdo de culpabilidad que evite un juicio.
Guzmán López, de 38 años, enfrenta ocho cargos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y posesión de armas, derivados de su presunta participación en el tráfico de grandes cantidades de fentanilo, cocaína, heroína y metanfetamina hacia Estados Unidos. Su detención en julio de 2024, junto con Ismael “El Mayo” Zambada, marcó un hito en la lucha contra el Cártel de Sinaloa. Sin embargo, Zambada acusó a Guzmán López de secuestrarlo y entregarlo a las autoridades estadounidenses, lo que ha generado tensiones legales y una investigación en México por delitos como traición a la patria, según la Fiscalía General de la República (FGR).
El aplazamiento de la audiencia refleja la estrategia de la defensa y los fiscales para negociar un acuerdo que podría incluir la declaración de culpabilidad de Guzmán López a cambio de una pena reducida o beneficios como testigo colaborador en otros casos relacionados con el narcotráfico. Este enfoque no es nuevo: su hermano, Ovidio Guzmán, extraditado en septiembre de 2023, también está en negociaciones similares, con una audiencia programada para el 12 de mayo. Ambos hermanos, representados por Lichtman, parecen buscar evitar un juicio prolongado, lo que ahorraría costos al gobierno estadounidense y podría ofrecerles sentencias más leves.
La situación de Guzmán López se entrelaza con la de “El Mayo” Zambada, quien enfrenta su propio proceso en Nueva York. Las acusaciones de Zambada sobre un supuesto secuestro han complicado el panorama, mientras que en México, la FGR insiste en esclarecer las circunstancias de la entrega de ambos capos a Estados Unidos. Este caso no solo pone en evidencia las pugnas internas dentro del Cártel de Sinaloa, sino también la cooperación transnacional en la lucha contra el narcotráfico, que sigue generando controversia en ambos lados de la frontera.
El próximo 2 de junio, la corte de Chicago, presidida por la jueza Sharon Johnson Coleman, será el escenario donde se definan los siguientes pasos en el caso de Joaquín Guzmán López. Mientras tanto, la atención permanece en las negociaciones que podrían reconfigurar el destino de “Los Chapitos” y su influencia en el crimen organizado. Este proceso, seguido de cerca por autoridades y medios, subraya la complejidad de combatir el narcotráfico en un contexto de alianzas, traiciones y acuerdos judiciales.